Como seres humanos nos inclinamos a escuchar y prestar atención a esas personas o mensajes que encontramos más cercanos, que parecen hablar “nuestro mismo idioma”, y este comportamiento no es ajeno en los entrenamientos.

Es por eso que una “experiencia reboot” suele tener un tono cercano.

Usar un tono cercano en los entrenamientos de innovación tiene varios beneficios importantes:

👉Fomenta la confianza: Al utilizar un tono cercano y amigable, los participantes se sienten más cómodos y confiados para expresar sus ideas e inquietudes. Esto crea un ambiente propicio para la colaboración y el intercambio abierto de ideas, lo que puede generar un mayor nivel de participación y compromiso.

👉Promueve la creatividad: Al eliminar las barreras jerárquicas y establecer un tono cercano, se fomenta la creatividad y la generación de ideas innovadoras. Los participantes se sienten más libres para pensar de manera creativa y desafiar el statu quo, lo que puede llevar a soluciones innovadoras y disruptivas.

👉Mejora la comunicación: Un tono cercano en los entrenamientos de innovación facilita la comunicación efectiva entre los participantes y los facilitadores. La comunicación abierta y directa es esencial para el intercambio de conocimientos y la comprensión mutua, lo que a su vez promueve la colaboración y la resolución de problemas de manera más eficiente.

👉Estimula la motivación y el compromiso: Un tono cercano y personalizado puede ayudar a los participantes a sentirse más motivados y comprometidos con el proceso de innovación. Al sentirse valorados y escuchados, es más probable que se involucren activamente y se comprometan con los objetivos y desafíos planteados en el entrenamiento.

<aside> 💡 Aquí te dejamos ejemplos de cómo utilizar este tono cercano en las experiencias.

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  1. Saludo amigable: Al comienzo del entrenamiento, puedes dar la bienvenida a los participantes con un saludo amigable y casual, por ejemplo: "¡Hola a todos! ¡Es genial tenerlos aquí hoy!
  2. Uso de lenguaje coloquial: Evita utilizar un lenguaje demasiado formal o técnico. Opta por un lenguaje más cercano y accesible para todos los participantes.
  3. Anécdotas personales: Comparte anécdotas o historias personales relacionadas con la innovación. Por ejemplo, puedes contar una experiencia propia sobre cómo enfrentaste un desafío creativo o cómo encontraste una solución innovadora en tu vida cotidiana. Esto ayudará a establecer una conexión emocional con los participantes y les mostrará que estás compartiendo conocimientos desde tu propia experiencia.
  4. Preguntas abiertas y conversacionales: Fomenta la participación activa mediante el uso de preguntas abiertas y conversacionales. En lugar de hacer preguntas directas como "¿Cuál es la solución correcta?", puedes preguntar algo como "¿Qué ideas se te ocurren para abordar este desafío? Estoy emocionado por escuchar sus perspectivas únicas".
  5. Uso de ejemplos cotidianos: Ilustra los conceptos de innovación con ejemplos cotidianos que los participantes puedan relacionar fácilmente. Por ejemplo, en lugar de utilizar ejemplos complejos de la industria, puedes hablar sobre cómo una pequeña mejora en un producto de uso diario puede tener un gran impacto en la vida de las personas.
  6. Mostrar empatía y apoyo: Muestra empatía hacia los desafíos y obstáculos que los participantes puedan enfrentar en el proceso de innovación. Hazles saber que entiendes las dificultades y que estás ahí para apoyarlos. Por ejemplo, puedes decir: "Sé que la innovación puede parecer intimidante a veces, pero recuerden que todos estamos aquí para aprender y crecer juntos.

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